En este primer artículo del blog, me he permitido reducir a un par de ideas las últimas informaciones sobre el futuro inmediato de internet:
- Se va a intentar traspasar la masa social de las redes sociales a mundos virtuales en los que cada usuario estará representado por su personaje (avatar, skin…).
- A un nivel técnico superior, se está trabajando en que esta experiencia no sea ya a través de la pantalla de un móvil o un ordenador, si no a través de unas gafas virtuales o similar.
Entre estos mundos virtuales, conocidos como metaversos, es de suponer que alguno en concreto destacará sobre el resto y será donde interactúe la gran mayoría. Está por ver si es el creado por FACEBOOK, que parece ser el que más está apostando por ello (de hecho, como habréis escuchado, ha cambiado el nombre de la empresa a «Meta«), aunque no el único.
El motivo principal del interés de las empresas implicadas en el desarrollo de un metaverso cabe imaginar que es el económico, ya que, por lo que se conoce hasta ahora, se basa en la compra-venta de propiedad digital (NFT) con monedas digitales (criptomonedas o similar), obligando al interesado en aprovechar la experiencia al máximo, a conseguir una cartera digital (Wallet) donde guardar y/o intercambiar las criptomonedas que también debe comprar. Siendo este mecanismo, una de las principales diferencias con otras experiencias anteriores similares, como por ejemplo, Second Life.
Con respecto a la experiencia del usuario, con las redes sociales, parece que ha quedado demostrada la naturaleza social del ser humano, por lo que tener más posibilidades para conocer personas afines o reunirse con familiares o amigos sin moverse de casa y de una forma más interactiva, podría ser motivo suficiente para seguirle el juego a las empresas auspiciadoras del proyecto.
Los padres con hijos que juegan, por ejemplo, al famoso videojuego «Fortnite«, ya han podido comprobar durante los últimos años como quedaban o se encontraban dentro del juego con sus amigos o compañeros de clase y deseaban comprar personajes propios para interactuar entre ellos. De hecho, la empresa creadora de Fornite, Epic Games, es otra de las implicadas en la creación del metaverso.
Sobre utilizar la realidad virtual (VR) para que las reuniones (de ocio o de trabajo) parezcan más reales, o la realidad aumentada (AR) para entrelazar el mundo físico con el virtual, por ejemplo con hologramas, no a través de la pantalla de un móvil o un ordenador (como por ejemplo en el videojuego «Pokemon Go»), si no de una manera más inmersiva mediante por ejemplo unas gafas virtuales, también parece un buen reclamo para los usuarios de las redes sociales ávidos de avances y mejoras en sus experiencias.
Sin embargo, lo que más me ha llamado la atención sobre todos estos avances, es el plazo para que se hagan realidad, y es que, por ejemplo, Mark Zuckerberg anunció hace apenas 3 semanas, que en 5 años empezaremos a disfrutar de esta tecnología. Con el tiempo veremos si el mundo (y su infraestructura) está preparado ya realmente para afrontar este cambio en la forma de comunicarnos, o si dicho corto plazo es más el interés de las empresas implicadas en publicitar el proyecto en el que van realizar una inversión tan importante.
¿Tú que opinas, te ves quedando con tus amigos, para ver un concierto en directo cada uno desde su casa y con su avatar?
Parece que no vamos a tener que esperar demasiado para comprobarlo, ¡seguiremos atentos a los acontecimientos!